miércoles, 27 de febrero de 2013

Cupcakes de plátano y chocolate

Ya estoy aquí. Vuelve a pasar mucho tiempo pero es que el frío me paraliza un poco. Creo que si pudiese hibernar lo haría. Salir de debajo del edredón me cuesta horrores y cuando lo hago es tarde para todo. Pero hoy traigo una receta de cupcakes de plátanos y chocolate.


Plátano en sí no lleva, lleva nesquik de plátano. Os puede sonar raro pero hace tiempo que se vende de este sabor y de fresa. En cualquier superficie comercial se puede encontrar.


La receta es bien sencilla, no se necesita amasadora ni nada especial. Los ingredientes son:
100 ml de aceite de oliva suave
200 gramos de azúcar
3 huevos
180 gramos de harina
2 cucharaditas de levadura en polvo (medio sobre)
50 gramos de nesquik de plátano
120 ml de leche (entera o semi)


Mezclar el azúcar con el aceite. Añadir uno a uno los huevos y batir. Tamizar la harina, la levadura y el nesquik y añadírselo a la mezcla anterior. Y por último la leche. Repartir en unas 18 cápsulas y al horno (180º) unos 20 minutos. Sacar. Dejar reposar dos o tres minutos y pasarlo a una bandeja para que se enfríe.


La cobertura de chocolate no tiene misterio. Habrá mil formas de hacerla pero la que a mí me funciona es la siguiente.
Una tableta de chocolate negro de cobertura de 200 gramos
Un tetabrick pequeño de nata para montar de 200 ml.
Y dos o tres cucharadas de azúcar (no lo suelo poner pero para mucha gente resulta fuerte sin él)


Calienta la nata en un cazo y antes de que llegue a hervir añade el chocolate a trocitos, no hace falta que sean minúsculos. Mezcla con una barilla con el fuego apagado hasta que se haya deshecho todo el chocolate y añade el azúcar. Es importante que no quede ningún trocito porque de quedar alguno atasca la boquilla y la verdad es un rollo. Dejar enfriar. Pasar a una manga pastelera con una boquilla (en este caso es la 1M) y a decorar.

El bizcocho queda superjugoso. Y el sabor a plátano no es excesivo, incluso hay a quien le cuesta reconocer el sabor.

Estoy perezosa para escribir pero no para encender el horno, jeje. Tengo algunas cositas pendientes. A ver si vuelve la primavera ya con su calorcito.

Nos vemos (ya no digo pronto porque luego no es cierto).

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